miércoles, 30 de abril de 2008

Fogel: "Internet no acabará con el periodismo escrito así como la televisión no acabó con la radio"

La Universidad Complutense de Madrid fue escenario escogido para la realización del III Congreso Internacional de periodismo en la Red. Como ponente inicial acogió a uno de los grandes expertos en el mundo de los medios digitales: Jean Fraçois Fogel.

Conocido por ser el asesor del diario Le Monde y uno de los colaboradores de la pagina web de dicho diario, Fogel, enfocó su discurso en torno a la web 2.0 y hacia cómo ésta ha influido y cambiado, de forma radical, la vida del ciudadano así como la de los profesionales de la información. En ese tono afirmó que "la web exige una actitud activa" por parte del navegante y que esta actitud refuerza al lector porque conlleva un "yo busco y yo encuentro". Es decir, una recompensa individual a un previo esfuerzo realizado.

Internet ha transformado la manera de entender el mundo. Los ciudadanos han creado redes de comunicación, antes impensables, como pueden ser Facebook o Tuenti. Además "no hay que pensar en internet como en la pantalla de un PC, sino en cualquier pantalla conectada a la red", aclaraba Fogel en su intervención en el Congreso. Además, no sólo se trata de cambios a nivel social sino cambios a nivel periodístico. Es decir, la manera de recopilar, elaborar, transmitir y recibir información se encuentra en un proceso de evolución y cambio constante.

Uno de los punto calientes del discurso del francés se centró en el periodismo digital y en cómo los periodistas han de adaptarse a este nuevo campo de trabajo cuya plataforma es la web. Sin duda, la audiencia de los medios es la que sigue marcando las exigencias y la que rige la demanda de información por eso, Jean Fraçois, no perdió la oportunidad para advertir de que con internet "los internautas tienen las mismas herramientas que los periodistas". Por eso el periodista, con sus capacidades y conocimientos tienen que enfrentar el "cara a cara con la audiencia" y, además, salir victorioso.

Ante tal disyuntiva, no queda otra opción que plantearse las siguientes preguntas: ¿significa el periodismo digital una amenaza para el periodismo "tradicional"? ¿Cualquier ciudadano que escriba en la web puede catalogarse como periodista ciudadano? Ante todo, hay que dejar de ver el internet como un enemigo para comenzar aprovechar cada una de la oportunidades que nos brinda, en este caso en el campo periodístico en particular. Y, no, cualquier escrito colgado en la web no está catalogado de periodístico. El periodismo se ajusta a unas máximas y un estilo propio que necesita ser aprendido y asimilado.

Cosa innegable es el incremento de la interactividad con los usuarios. Las rígidas barreras que antes separaban emisor de receptor, van desapareciendo en el nuevo medio, para crear una red global y democrática en la que cualquier usuario puede tener, si no voto, si mucha voz. Jean Fraçois Fogel intentó aclarar, desde su punto de vista, la aparente dicotomía entre periodismo tradicional y ciberperiodismo admitiendo que "el periodismo ciudadano no supone un peligro para el periodismo en sí, pero es difícil establecer en la web un espacio que pertenezca sólo a los periodistas". Además, sentenció diciendo que "los periodistas deben definir su relación con la audiencia porque no ha posibilidad de escapar de ella".

En conclusión, es cierto que internet da un voto de confianza a la voz del ciudadano pero, esto no debe significar ningún peligro para los profesionales de la información. Son ellos lo que se tienen que encargar de destacar pero encima del resto de la sociedad. En palabras del ponente: "el periodismo es fácilmente defendible en una sociedad democrática en la que la voz se expresa de manera gratuita, libre, independiente; si la voz tiene calidad suficiente, no se prescindirá de esa voz", concluye Jean François Fogel.